El árnica aparece en muchas zonas de Galicia, crece en zonas de prado, así como en lugares donde hay brezos y turbeiras. Se utiliza como antiinflamatorio, presente en geles y en espráis, tiene más demanda en países europeos como Alemania.
La flor se recolecta manualmente en la primavera ya muy avanzada, o finales de mayo o a principios de junio. A continuación, se produce el secado, que puede durar uno o dos días a una temperatura no muy alta (entre 35 o 40 grados) ya que entonces puede perder los principios activos.
Su uso en la industria farmacéutica viene de lejos, desde hace ya varias décadas, aunque se utilizaba de otro modo, cuando se ponía a macerar en alcohol o en aguardiente antes de ser utilizada.
En algunos países de Europa, sus especies están protegidas por su escasez, debida a sus altos requerimientos ecológicos y a que está en trance de extinción, debido a su recolección furtiva para su venta como remedio medicinal.
Fuente: lavozdegalicia.es